Nuestra Hermandad ha tenido al menos tres imágenes de la Santísima Virgen a lo largo de su historia.

Las primeras noticias que se tienen, nos dicen que en el siglo XVIII se veneraba como titular a Nuestra Señora de la Soledad, imagen que a finales de esta centuria al parecer se encontraba en un estado de conservación bastante lamentable.

Tan es así, que encargado al escultor Cristóbal Ramos que la restaurara, éste lo que hizo fue proponer hacer una nueva mascarilla, lo cual fue aceptado y costeado por los hermanos de la Hermandad. Por lo tanto la primitiva imagen titular de la Hermandad fue sustituida por una modelada en barro cocido por Cristóbal Ramos a finales del XVIII o principios del XIX.

Esto no debió de contentar a una parte de los Hermanos, ya que en 1817 le piden al párroco que les devuelva la antigua mascarilla que tenía en su poder para reponer al culto a la primitiva imagen. Ante esta situación, el Arzobispado interviene por medio del Vicario, dictaminando éste que sea la nueva imagen de Cristóbal Ramos la que continúe expuesta al culto por ser más decorosa.

Esta imposición terminó de soliviantar a los ya descontentos hermanos, hasta tal punto que la noche del 14 de diciembre de 1817 unos desconocidos sorprendieron al sacristán de la parroquia, lo amarraron un naranjo de un huerto cercano y profanaron la imagen de Nuestra Señora de la Soledad, arrancándole la mascarilla y desfigurándola.

La Hermandad debió de caer en un estado de letargo debido a estos hechos, pues no se vuelve a tener noticia hasta dos años después, en 1819, cuando algunos Hermanos solicitan al Arzobispado reanudar los cultos, para lo cual ya habían encargado al imaginero Juan de Astorga una nueva talla. Ante esta solicitud, el Vicario decide pedir a la Hermandad que entregue las dos mascarillas antiguas, la primitiva y la profanada, y autoriza a Juan de Astorga para que talle la nueva imagen.

El día 16 de agosto de 1819 Juan de Astorga entrega a los Hermanos de la Hermandad Juan Montaño, Juan de los Santos y Juan Muñoz la nueva talla, hermanos que rindieron su importe al imaginero. El Vicario ordenó que la imagen se bendijera como Nuestra Señora de la Soledad y le pidió al párroco que pusiera todo su empeño en que cesaran los conflictos.

Esta imagen de Nuestra Señora de la Soledad esculpida por Astorga es sin duda alguna la que actualmente veneramos como Nuestra Señora de los Dolores Coronada, la cual, a pesar de la intervención de Francisco Buiza, no oculta los rasgos más característicos del maestro imaginero Astorga.

No es extraño el cambio de advocación de una imagen debido a modas o motivos devocionales, y menos aun cuando se trata de una historia con tantos altibajos como los ha tenido nuestra Hermandad.

Podría haber sido a principios del siglo XX cuando, tal vez con el espíritu de superar los malos momentos vividos en el pasado, se revitalizara la devoción a la Imagen y la rebautizaran como ha llegado a nuestros días: Virgen de los Dolores Coronada.

La imagen ha sido sometida a diversas intervenciones a lo largo de su historia. Sin duda la más importante de ellas la realizó Francisco Buiza en 1966, quien le sustituyó el candelero por uno más alto y le modificó notablemente su aspecto, abriéndole los ojos y dramatizando más el rostro, acentuando el enrojecimiento de las mejillas.

Más recientemente, en 1996, Antonio García Romero, profesor de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Sevilla, realizó un profundo trabajo de limpieza del rostro de la dolorosa, retirando la suciedad acumulada con el paso de los años y sacando a relucir la policromía original que Astorga imprimiera a la imagen.

Devocionalmente, todos los corazones de Camas apuntan a la Virgen de los Dolores Coronada Tanto es así que desde 1926, y por petición popular, es Patrona Principal de la ciudad, la cual además, en 1972 le concedió la Medalla de Oro de la Villa y en 1999 le concedió el título de Alcaldesa Honoraria Perpetua otorgándole además su bastón de mando y en 2013 recibió la Gracia de la Iglesia de Sevilla con la Coronación Canónica en la Santa Iglesia Catedral de Santa María de la Sede.